Y no me importa nada porque al final de todo volvimos a hablar".
Es para matarme. Increíble lo tonta/o que uno se puede poner por otra persona. Y no me gusta, porque me muestro débil, no pienso en mí, no digo totalmente lo que pienso, si está todo mal, yo estoy mal; si está todo bien, yo estoy más que bien. No soy lo que era antes. Bueno, nada. Parece lindo pero también es feo. Igual la mayor parte del tiempo es todo lindo (hasta que caes de vuelta). No pasa nada igual, es algo que se tiene que pasar y en parte me alegra estar pasándolo.
Igual la parte de pedir perdón por algo que me salio hacer, por impulso y espontaneidad, está mal.. pero bue, lo hice y todos felices.
Por otra parte, como mencione antes, me jode el ser tan débil ante alguien, yo de por sí suelo ser un tanto débil, con las cosas en general.. y encima le sumamos esto.. ya está, cartón lleno!.